La relación de pareja es una parte muy importante de la vida de muchas personas. Cuando te diagnostican un cáncer de mama, la relación puede ser un apoyo fundamental, pero también puede ser una fuente de estrés. Dependerá en parte de los recursos que ambos tengáis para afrontar esta nueva situación y de cómo los utilicéis.
Es importante que seáis capaces de mantener una comunicación adecuada, de manera que la enfermedad no se convierta en un tabú, que podáis ir resolviendo juntos los problemas que surjan y os apoyéis mutuamente. Si valoráis la forma en la que os estáis comunicando, los silencios, las actividades que compartís, las necesidades de cada uno, la forma en que estáis resolviendo los problemas o compartiendo tristezas y alegrías… quizás encontréis la forma de seguir sintiéndoos cerca el uno del otro sin que la enfermedad afecte a la relación.
En el caso de que no tengas pareja, puedes encontrar apoyo en otras personas durante el tratamiento. Y si deseas establecer o surge una relación, no hay motivo para que no lo hagas. En este caso, puedes aprender a manejar tus dudas, miedos y tu inseguridad ante la nueva relación.