Volviendo a gustarte
Recuerda,
No confundas tu atractivo físico con el personal. Tú eres una persona valiosa por ti misma y no sólo por tu aspecto.
Identifica y recuerda los logros que has conseguido a lo largo de tu vida en diferentes facetas: trabajo, amigos, familia…
Fíjate en tus aspectos positivos y poténcialos. Con frecuencia prestamos excesiva atención a lo que no nos gusta y olvidamos otros aspectos positivos.
Céntrate en aquellos aspectos o partes de tu cuerpo que más te gusten: tu cintura, tus hombros, tus ojos… y ensálzalos.
Contacta con otras mujeres que han pasado por lo mismo. Compartir experiencias y conocer cómo han salido adelante te ayudará.
Recuerda que tú también puedes contribuir a que otras personas de tu entorno se acostumbren a los cambios. Si te muestras con naturalidad, los demás terminarán aceptándolos.
No descuides tu aspecto físico: el maquillaje, la piel, el pelo, utiliza una prótesis si la necesitas.
Si te han realizado una mastectomía, valora con tu médico una posible reconstrucción mamaria
Si lo necesitas, pide ayuda a un psicólogo especializado